Una vista panorámica del  Salón Internacional del Automóvil que se cumple en Ginebra. El encuentro enseña las nuevas propuestas e innovaciones de la industria automotriz. Foto:  AFP

Una vista panorámica del Salón Internacional del Automóvil que se cumple en Ginebra. El encuentro enseña las nuevas propuestas e innovaciones de la industria automotriz. Foto: AFP

La industria de autos de lujo es más competitiva

12 de marzo de 2018 06:45

En el mercado de los automóviles de lujo, los fabricantes alemanes corren en cabeza pero pronto su prestigio podría resultar insuficiente ante los competidores cada vez más numerosos que apuestan por los coches eléctricos para imponerse.

Volkswagen (con Audi y Porsche), Daimler (con Mercedes) y BMW representan cerca del 80% del mercado de lujo mundial. Nadie imagina que puedan perder de repente esta posición, construida pacientemente durante décadas.

Pero el auge de los vehículos eléctricos, acelerado por el declive del diésel, y la creciente demanda de coches inteligentes crean condiciones nuevas que amenazan al trío considerado invencible en un momento en que la imagen Made in Germany se ve dañada por el escándalo de los motores trucados de Volkswagen.

“Los fabricantes alemanes tienen una posición indiscutible en los automóviles térmicos, pero Tesla logró convertirse en número uno de los coches eléctricos”, dice Willi Diez, experto del Instituto para la Economía del Automóvil (Ifa), con sede en Alemania. “El reto es compensar este retraso para tener una imagen de excelencia no solo en el mundo antiguo sino en el nuevo”.

Bernhard Mattes, presidente de la asociación de la industria automotriz alemana (VDA) decía la semana pasada tener mucha confianza, antes de la inauguración de la 88ª edición del Salón Internacional del Automóvil.

Los fabricantes alemanes, que desde hace años registran beneficios récords, invertirán 40 000 millones de euros en tres años en la electrificación y de 16 000 a 18 000 millones en los vehículos conectados y autónomos.

Los tres gigantes alemanes se benefician principalmente de una “posición fuerte en el mercado chino”, primer mercado mundial, que sigue creciendo, señala Diez, considerando que el prestigio y la tradición son su principal fuerza. Ni Toyota (con Lexus), ni Nissan (con Infiniti) constituyen verdaderos rivales.

“Desde hace tiempo lo intentan, pero les faltan raíces y tecnología, contrariamente a Jaguar, Land Rover y Volvo”, explica Ferdinand Dudenhöffer, director del Center Automotive Research.

En el caso de Land Rover y Jaguar “vuelven la historia, el mito, la imagen”, agrega Diez, que les reconoce un “gran potencial”, al igual que Volvo, cuyo todo terreno XC40 fue designado el lunes coche europeo del año.


Un joven competidor


Tesla demostró en una decena de años que se puede crear una marca a partir de cero y hacer competencia a las firmas históricas con precios que rondan los 100 000 euros.

En el mercado estadounidense, la joven empresa vendió tantos vehículos como Porsche el año pasado. Y en el mundo, un total de 100 000 coches en 2017.

Su nuevo automóvil compacto, el modelo 3, comercializado por menos de 40 000 euros, registró cientos de miles de pedidos.

Pero a Tesla le cuesta aumentar su ritmo de producción, lo que hace dudar sobre su capacidad para entregarlos. Si la empresa de Elon Musk logra la fabricación en serie de este modelo, será “un competidor muy serio”, reconoce Dudenhöffer.

Pero en Ginebra no fueron los alemanes sino el fabricante británico Jaguar quien presentó un “ejército anti Tesla”, con el I-PACE, su primer coche eléctrico. “Los alemanes estarán en la carrera de la movilidad eléctrica en 2019, 2020”, dice Dudenhöffer. Mientras tanto, la competencia corre ya.