Fredy Andrango y Charic Amaguaña son  los socios y propietarios de Ushuta, que salió al mercado en abril. Foto: Armando Prado / LÍDERES

Fredy Andrango y Charic Amaguaña son los socios y propietarios de Ushuta, que salió al mercado en abril. Foto: Armando Prado / LÍDERES

Neumáticos para fabricar zapatos con toque andino

21 de julio de 2017 21:09

Los indígenas imbabureños utilizaban el caucho de los neumáticos para elaborar sus alpargatas. A este tipo de calzado lo denominaban ushuta, que en quichua significa zapato.

Este concepto coincidió con la propuesta de los emprendedores Fredy Andrango y Charic Amaguaña. La familia de Andrango es propietaria de un empresa de transportes y buscaba hacer algo con los neumáticos desgastados de los grandes vehículos.

En enero de este año, luego de que el emprendedor regresara de culminar su maestría en la Escuela de Negocios Hult, en San Francisco (EE.UU.), decidió trabajar en su negocio sostenible.

La primera alternativa que barajó fue elaborar calzado con plantas elaboradas con caucho reutilizado de las llantas. Para concretar su idea contactó a Amaguaña, quien ya tenía experiencia en la fabricación de calzado.

Ambos trabajaron en modelos atractivos para los clientes. Los dos tenían la meta de que los productos reciclados también pueden tener diseños vanguardistas que llamaran la atención a potenciales clientes.

Para empezar invirtieron USD 20 000 para la manufactura de un primer lote de zapatos y la conformación del emprendimiento. El 80% del monto se destinó a la compra de materiales e insumos para la fabricación del calzado. El 20% restante se utilizó para la elaboración de etiquetas, los empaques y trámites del negocio.

Con una primera colección de 200 pares de zapatos para hombres, mujeres y niños, en abril de este año, salió al marcado Ushuta.

El concepto principal es crear un producto con identidad andina que pueda ser exportado. Incluso notaron que Ushuta puede ser fácilmente pronunciado por estadounidenses, por ejemplo.

Ahora no solamente usan los neumáticos que se reciclan de la empresa de Andrango. También, buscan el material en vulcanizadoras de la provincia.

La parte superior del zapato, es decir, la capellada, explica Amaguaña, es elaborada en telares de madera, que le da el toque artesanal y valor agregado al producto.

Actualmente, su proceso de producción funciona en dos puntos: uno en Cayambe (Pichincha), como punto de acopio de las llantas, y la planta de producción en Otavalo (Imbabura).

Por ahora, el principal punto de venta es su página web ushuta.com y sus redes sociales; los pedidos se entregan a domicilio. Desde hace algunas semanas ya tienen presencia en tiendas de la provincia de Imbabura. Además, buscan llegar a otras ciudades.

Desde abril han logrado ventas entre los USD 3 000 y 4 000 por mes y ahora trabajan en la producción de un lote más grande.

Otra de las propuestas de Ushuta, dice Andrango, será destinar parte de las ganancias para el desarrollo de comunidades locales.

En Sol te Viste, que tiene locales en Atuntaqui y Otavalo, se comercializa Ushuta desde hace un mes. Su propietario, Javier Solano, cuenta que los zapatos han tenido aceptación entre sus clientes.

Las personas, dice Solano, buscan sobre todo el calzado para los niños aunque jóvenes también se animan a comprarlos gracias a sus diseños. Esta tienda también los vende en redes sociales.

La producción

El comienzo. En la primera producción fabricaron 200 pares de zapatos, con modelos para hombres, mujeres y niños.
Los costos. Los precios de los zapatos oscilan entre los USD 30 y 50 cada par.
La nueva producción. Actualmente, la empresa trabaja en una producción de 1 000 pares para ser comercializados a través de diferentes canales.
La promoción. Redes sociales, como Facebook, Instagram y su sitio web: www.ushuta.com