La OPEP mantuvo este viernes (5 de junio) su techo oficial de producción, para defender su parte de mercado frente a la competencia de los petróleos no convencionales.

Cumpliendo con lo esperado por inversores y analistas, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) decidió conservar su tope oficial de 30 millones de barriles diarios, invariable desde hace tres años y medio.

La organización formada por 12 países prolonga así la estrategia adoptada en la reunión de noviembre, consistente en seguir produciendo mucho para sacar del mercado a los productores de petróleos no convencionales, y no en defender un determinado nivel de precios.

La reciente ralentización de la producción de petróleo de esquisto en Estados Unidos y de las arenas bituminosas de Canadá, más costosa, ha sido percibida como una victoria para el grupo, que extrae el 30% del crudo mundial.

"Fue una muy buena decisión", se felicitó el ministro kuwaití Ali al Omair al salir de la reunión con sus homólogos. El ministro emiratí, Suhail al Mazrouei, dijo que estaba "muy feliz" con lo acordado.

"Tomamos la mejor decisión que podíamos haber tomado", dijo el ministro venezolano Asdrúbal Chávez, pese a que su país, muy dependiente del crudo, está sufriendo con este contexto de precios bajos del crudo.

"Seguimos trabajando para (...) tener un precio razonable y justo para nuestro principal recurso", añadió Chávez, que desea una colaboración amplia con países no miembros de la OPEP para estabilizar el mercado y vigilar mejor su evolución.

Tras la decisión, el barril de 'light sweet crude' para entrega en julio perdía 50 centavos, a USD 57,50 hacia las 13:15 GMT. En Londres, el Brent cedía 51 céntimos, a USD 61,52.

En un seminario previo a la reunión ministerial, varios países -Angola, Venezuela, Ecuador, Irak, Irán y Kuwait- manifestaron que no estaban satisfechos con los precios actuales, y que preferían un barril entre USD 75 y USD 80.

Una demanda "fuerte"

En un mercado sobreabastecido, la época del barril a más de USD 100, como era el caso hace un año, ha quedado lejos, y los países de la OPEP esperan ahora una recuperación vigorosa de la demanda, gracias a la política de precios bajos a la que están contribuyendo.

"La realidad es que no podemos tener más esos USD 100 (por barril). Eso es un hecho, nuestro barril vale menos. Y lo que hicimos en noviembre es en beneficio de los países ricos y los países pobres" del organismo aseveró el secretario general de la OPEP, Abdalá El Badri, en conferenca de prensa.

"La OPEP no tiene un objetivo de precio (...) eso se lo dejamos al mercado", añadió. El ministro catarí de Energía, Mohammed Al Sada, incidió en que "la demanda y la oferta presentan ambas una tendencia natural sana", y que los países de la OPEP están respondiendo con su vigorosa oferta a esa demanda "fuerte".

La OPEP produce en realidad por encima de su tope oficial, y en abril por ejemplo sacó al mercado 31,21 mbd, según la Agencia Internacional de la Energía.

El sobreabastecimiento del mercado puede verse acentuado con el regreso pleno de Irán al mercado petrolero, si firma con las grandes potencias un acuerdo nuclear de aquí a fin de junio y se le levantan las sanciones internacionales.

El ministro iraní, Bijan Zangeneh, dijo el miércoles pasado que si se levantan las sanciones en unas semanas, el país será capaz de producir un millón de barriles diarios adicionales en el plazo de medio año.

Al salir de la reunión de este viernes 5 de junio, el ministro declaró que su país no necesita un acuerdo con la OPEP para subir su producción, y que sencillamente lo hará "cuando se levanten las sanciones". El Badri señaló que es todavía pronto para abordar la cuestión, y que se hará llegado el momento. La próxima reunión ministerial de la OPEP se celebrará en Viena el 4 de diciembre.