Pedro Maldonado O. / Redacción Quito
Descrición
¿Te sirvió esta noticia?:
Si 0
No 0

Las aerolíneas alistan la mudanza

Una mudanza de magnitud. Esto es lo que ocurrirá en octubre de este año, cuando las aerolíneas, nacionales y extranjeras, culminen el traslado de su mobiliario, maquinaria, equipos informáticos, de telecomunicaciones... al nuevo aeropuerto internacional de Quito.

La mudanza incluye el transporte de vehículos de carga, tanqueros y más maquinaria utilizada por las líneas aéreas que operan, hoy en día, en el aeropuerto ubicado en el norte de la capital y que, según lo ha anunciado el Municipio capitalino, dejará de operar el 11 de octubre.

Un dato ayuda a comprender la magnitud del traslado: unos 250 camiones transportarán todo tipo de carga en las 18 horas previas al cierre del aeropuerto. Así lo asegura Christian Córdova, gerente de ventas y mercadeo de DHL Global Forwarding Ecuador, la firma que se encargará de la logística de la mudanza.

En todo este proceso de mudanza, que arrancará en agosto, se emplearán unos 600 ó 700 camiones, añade Córdova.

En la actualidad, en el Aeropuerto Mariscal Sucre operan 11 aerolíneas con vuelos internacionales, cuatro con vuelos domésticos y seis que transportan carga. Según Quiport, todas mantendrán sus operaciones en la nueva terminal aérea, en Tababela; su apertura está prevista para el 12 de octubre. Quiport no ha recibido hasta la fecha notificaciones sobre nuevos aviones o incremento de frecuencias.

Para cumplir con el traslado, las aerolíneas ya ejecutan programas internos. Tame, por ejemplo, nombró en enero pasado un comité que, en reuniones semanales, revisa tareas operacionales, logísticas y otros aspectos previos a la mudanza.

Patricio André, director general de Operaciones de Tame, agrega que desde hace tres semanas, un grupo de 10 personas de la aerolínea participa en las pruebas operacionales que Quiport organiza en Tababela. Añade que el número de frecuencias se mantendrán en principio. “Puede darse un incremento, pero tenemos una incógnita: las vías de acceso y la reacción de los clientes” (ver página 15).

En lo que tiene que ver con la infraestructura requerida, Tame llegó a un acuerdo con Quiport para arrendar un hangar solo para la aerolínea nacional. “Allí estamos invirtiendo USD 1,3 millones, para oficinas, talleres, la parte operativa, áreas de mantenimiento, etc.”.

En cuanto a los aviones que se usarán en Tababela, André señaló que son los 12 con los que Tame opera actualmente.

American Airlines también tiene lista su estrategia. Sergio Castro, gerente de Ventas de la aerolínea de bandera estadounidense, señala que la compañía espera continuar los dos vuelos diarios actuales a Quito y en las mismas aeronaves. “Actualmente, operamos desde y hacia Quito con aeronaves Boeing 757, con capacidad para 188 pasajeros”.

Según Castro, el nuevo aeropuerto ofrecerá a los pasajeros de la aerolínea una terminal más moderna, con espacio adicional. “Creemos que esto es una noticia positiva para nuestros clientes”.

Al hablar sobre posibles nuevas frecuencias, Castro sostiene que American Airlines realizará ajustes si fueran necesarios para mantenerse competitivos. “Para asegurar una red eficiente y productiva, pudiéramos tener ajustes adicionales a nuestros vuelos como parte de nuestra evaluación continua de nuestras operaciones, flota y los niveles de servicio”.

Copa Airlines alista su traslado. Su gerente en Ecuador, Miguel Reyes, considera que la transición es ordenada. Él cree que para agosto se dará la mudanza de las oficinas y enseres que tienen en el actual aeropuerto a la nueva terminal.

En total, 34 personas que trabajan en las oficinas de Copa del Mariscal Sucre se trasladarán. “El cambio implica una inversión de unos USD 25 000 en tecnología; además, renovaremos mobiliario”.

Reyes también habla de un reto: los horarios en el nuevo aeropuerto. Se extenderán las horas de trabajo y eso representará un costo para la aerolínea. “Además, nos corresponde garantizar seguridad, alimentación y transporte de nuestro personal. La gente tendrá que adaptarse como en cualquier aeropuerto del mundo”.

Reyes cree también que en el nuevo aeropuerto habrá un mayor volumen de pasajeros que en el actual. “El futuro también puede ser de más frecuencias”.

KLM, del Grupo Air France-KLM, también está trabajando en la adaptación, para poder operar desde el nuevo aeropuerto, aunque no ofreció mayores detalles. No obstante, la aerolínea anticipó que incrementará una frecuencia a las cuatro existentes, a partir del 6 diciembre próximo; es decir, tendrá vuelos los martes, miércoles, jueves, viernes y domingos. KLM también indicó que continuará con la operación del Boeing 777 combinando su versión 300 y 200.