Su vida no ha estado exenta de duras pruebas pese a su juventud. Pero ello no ha sido un obstáculo para alcanzar puestos de alta gerencia relacionados con la movilidad. Andrea Flores, la flamante gerenta del Metro de Quito desde el 12 de enero del 2021, alcanzó este cargo luego de acumular experiencia en temas jurídicos y de normativa de transporte desde los 22 años, en distintas entidades nacionales y del exterior.

Con dos hijos y un esposo que la apoyan, sigue trazándose nuevas metas. Entre ellas, hacer del Metro de Quito un referente de la paridad de género con mujeres preparadas en todas las áreas del nuevo sistema de transporte.

Su formación en movilidad
​
“Entré al Ministerio de Transporte en junio del 2011, a punto de graduarme de abogada. No me atraía el sector público, pero quien me entrevistó para el puesto me dijo que si me dedicaba a estudiar los temas de transporte desde el ámbito legal, nunca me faltaría trabajo. No se equivocó. Al poco tiempo y teniendo apenas 22 años, pasé de despachar trámites a estar encargada de la Subsecretaría y luego a ser asesora en el Viceministerio de Transporte.
Estuve un año y medio en esta Cartera trabajando en la normativa de transporte terrestre”.

La ANT y el Municipio

“Posteriormente, la Directora de la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) me ofreció ir a esa entidad como Directora Nacional de Regulación. Antes de cumplir 24 años, ya estaba a cargo del proceso de homologación vehicular de todas las marcas.

En el 2015, me invitó la administración del alcalde (Mauricio) Rodas a formar parte de la Secretaría de Movilidad, como Directora de Asesoría Jurídica. Aquí tenía una interacción directa con los transportistas y la ciudadanía y participé en la elaboración de la política tarifaria para Quito, entre otros procesos. Llegué a ser Secretaria de Movilidad y dejé el Municipio de Quito, en abril del 2018”.

Enfrentar tiempos difíciles
​
“Salí de la Secretaría de Movilidad, en medio de una denuncia relacionada con presuntos actos de corrupción de funcionarios públicos en el proceso de regulación de taxis, donde me quisieron involucrar. Puse mi renuncia en medio de esa investigación porque dos semanas antes de que comenzara, me nombraron Secretaria de Movilidad. Simplemente estuve en el momento y en el sitio equivocado.

Los temas se manejaban en una esfera política de la que yo no formaba parte. Sin embargo, tuve que hacer frente a este proceso de investigación. Entre la indagación previa y la etapa preparatoria de juicio pasaron cerca de dos años. Luego de este tiempo, en marzo del 2020, el juez decidió no aceptar la acusación en mi contra y dictó el auto de sobreseimiento a mi favor. No hubo nada que me involucre y se declaró mi inocencia. Quedé totalmente absuelta, tras dos años”.

El trabajo con la ONU
​
“Durante el tiempo que estuve defendiéndome en este proceso, sí me cuestioné sobre si seguir trabajando en temas de movilidad desde el sector público. Pero al poco tiempo, debido a mi prestigio y mi trabajo, me llamaron como asesora en empresas de transporte y en septiembre del 2018, la Oficina de Servicios para Proyectos de las Naciones Unidas se contactó conmigo porque estaba buscando a una especialista en normativa de transporte terrestre.

Ellos me contrataron para diseñar la preoperación del tranvía en Cuenca. Me trasladé a vivir allá con mi hijo y, luego de terminar esa asesoría, me llamaron del Municipio de Guayaquil. Después de eso me volvieron a llamar a la Secretaría de Movilidad del Municipio de Quito, bajo la administración del alcalde (Jorge) Yunda. Aquí pasé a ser Gerenta de la Empresa de Pasajeros, a cargo del trole y la ecovía, y, luego, fui nombrada como Gerenta del Metro”.

El liderazgo y la mujer

“La empatía es un factor primordial para un liderazgo efectivo. Uno debe entender cuáles son las circunstancias a las que todo el equipo está expuesto. Me pasó en el trole donde estaba al frente de un equipo de 1 800 personas. Me involucré en madrugar con recaudadores y conductores, y en acompañarlos en los cierres. Ahí entendí sus necesidades y en base a ellas tomábamos decisiones. Un líder efectivo conoce las necesidades de su equipo.

Creo que aún existe mucho machismo y prejuicio en el país contra las mujeres y los jóvenes que llegan a jefaturas. Pero eso no existe en mi hogar, donde junto con mi esposo formamos un equipo sólido que se apoya en todas las responsabilidades. Valoro mucho el tiempo con mi familia y lo aprovecho siempre al máximo”.

Su perfil

Su educación
Estudió Derecho en la Universidad Alfredo Pérez Guerrero. Es especialista en Derecho procesal de la Universidad Andina Simón Bolívar. Es experta en Normativa de Transporte, calificada por la Organización de Naciones Unidas.

Sus cargos
​
Ha ocupado puestos directivos y de asesoría en el Ministerio de Transporte, la Agencia Nacional de Tránsito, la Secretaría de Movilidad del Municipio de Quito, la ONU y el Municipio de Guayaquil.