La Cooperativa Rafael González (izq.) tiene una tienda en Biblián. Puertas del Cielo envía carteras y sombreros (arriba y abajo).

La Cooperativa Rafael González (izq.) tiene una tienda en Biblián. Puertas del Cielo envía carteras y sombreros (arriba y abajo). Foto: Xavier Caivinagua para LÍDERES

Artesanas optan por nuevos productos

13 de mayo de 2020 10:17

El tejido de la paja toquilla se diversificó entre las artesanas de Cañar. Ellas optaron por elaborar con esta fibra natural carteras, bolsos, llaveros, bisutería, objetos utilitarios y adornos para acceder a los mercados internacionales.

Los destinos principales de estas nuevas alternativas son Estados Unidos, Inglaterra, Francia, Brasil, Italia, Singapur, China, entre otros países.

Rosa Cadme es representante legal de la Cooperativa de Producción Artesanal Puertas del Cielo, que teje los productos de la marca Azohat. Según ella, esta agrupación cuenta con tres líneas. La primera y más antigua son los sombreros. La segunda son los bolsos y las carteras.

La última son la bisutería y adornos, diademas, joyeros, abanicos, collares, manillas, entre otros. Hay objetos que combinan la paja toquilla con retazos de macana. Esta última prenda son los chales de la Chola Cuencana.

Son promocionados mediante el sitio web www.azohat.ec. Es uno de los canales para mostrarse en el exterior y efectuar contactos. Además, tienen catálogo virtual y otro físico.

Cada una de las 104 socias y sus familias tienen su especialización. Cadme explica que la mitad de las artesanas se dedica al tejido de los sombreros y el resto a las otras dos líneas de producción. De estas últimas venden desde el 2018 a Brasil, Estados Unidos, Singapur, España y otras naciones de la Unión Europea.

A inicios de este año enviaron una docena de carteras y bolsos como muestra a Londres. Su objetivo -después de la cuarentena por el covid-19- es conseguir pedidos más seguidos en el exterior.

Cadme cuenta que los bolsos y las carteras se envían en la tonalidad original de la paja o teñidos en colores negro, marrón, azul, fucsia, naranja o multicolores.

El año pasado exportaron más de 300 unidades de bolsos y carteras y otras 500 de bisutería. Durante el 2018 fueron 50. Antes de la pandemia del coronavirus, su objetivo era alcanzar las 450 por mes y finalizar el 2020 con 1 000 mensuales. Ahora esperan que la situación se normalice.

Para las socias, dice Cadme, esta actividad es complementaria a sus tareas del hogar y agrícolas. “Hay potencialidad en estas nuevas líneas, al igual que en el sombrero de paja toquilla”.

Otra innovación para la exportación es pintar los sombreros. Las artesanas tejen la paja y cuando este artículo está terminado la imagen escogida es pintada por artistas de la escuela de Arte de la Universidad de Cuenca.

Ellos plasman figuras de colibríes, iguanas, tortugas, iglesias y otros diseños. Pintan a mano.
Estrategias similares aplican las socias de la Cooperativa Rafael González, en el cantón Biblián. Son 120 socias de las zonas de Gulanza, Vaquería, Sageo, Papaloma, Saltos. 10 se dedican al tejido de bolsos y carteras, aretes, esferos, llaveros y collares, que cuestan desde USD 4,5 hasta USD 50.

Según la presidenta de la organización artesanal, Lourdes Cárdenas, durante el año pasado exportaron más de 50 unidades a Europa y España. Fueron esteras y bolsos y enviaron muestras a Países Bajos. Tienen más de 20 modelos de bolsos y carteras.

Las 27 socias de la Cooperativa Unión Cañari también tejen sombreros, bolsos, carteras, adornos, llaveros, fruteros y tapetes, dijo la dirigente Elvira Pérez. Sus mercados son Francia e Inglaterra. Elaboran 200 sombreros al mes y 100 de las otras opciones.