La producción de calzado urbano Bull, en Ambato, cumple los estándares que ayuda a comercializar en las grandes cadenas comerciales del país. Fotos Raúl Díaz para LÍDERES

La producción de calzado urbano Bull, en Ambato, cumple los estándares que ayuda a comercializar en las grandes cadenas comerciales del país. Fotos Raúl Díaz para LÍDERES

La capacitación es la clave en esta empresa de calzado

15 de agosto de 2018 11:20

Bull es una marca de calzado que abastece a las grandes cadenas en el país. La firma ambateña está un paso adelante en el negocio presentando nuevas colecciones de zapatos urbanos para hombres y mujeres, con una variada mezcla de colores.

La suavidad, la durabilidad, el confort y lo llamativo de sus diseños son el gancho de la marca para ganar mercado.

Se suma la calidad de los materiales importados como el cuero, las fibras o telas y el terminado. En la actualidad la firma confecciona entre 200 y 250 pares de zapatos diarios. Esto permitió que el año pasado facturara USD 450 000.

La marca se comercializa en cadenas de Cuenca, Guayaquil, Quito, Manabí y otras ciudades.

La historia de Bull se inició en el 2007 cuando sus propietarios Sandra Toro y Daniel Jiménez retornaron de Estados Unidos con la idea de montar su propia empresa. La primera inversión fue USD 30 000 de sus ahorros.

Con el dinero adquirieron cueros, suelas y otros materiales y arrancaron con la confección de zapatos formales para hombre. La empresa Torino les facilitó la maquinaria para producir su marca durante cuatro años.

Belisario Toro, el suegro de Jiménez, le transmitió todos los conocimientos del mundo del calzado. En el 2011, los emprendedores decidieron comprar sus propios equipos y se separaron. Con USD 15 000 de inversión adquirieron las máquinas de aparar y la enfriadora. Comenzaron con ocho colaboradores y actualmente tienen 18 empleados directos y nueve indirectos; los últimos trabajan bajo la modalidad de maquila.

Daniel Jiménez, gerente de la empresa, recuerda que el mercado de los zapatos formales decayó y sus clientes buscaban nuevos diseños y colores. Por eso decidió dar un giro presentando nuevas tendencias de la moda.

La capacitación fue clave. Participó en varios cursos para especializarse en diseño, con el Ciatec de México. En la actualidad produce sus propios diseños de temporada. “La idea es entregar un producto de calidad y que llena las expectativas de nuestros clientes que son exigentes”, dice Jiménez.

Bull (toro en inglés) surgió por el apellido de su esposa. La pareja trabaja para que su producto sea sinónimo de calidad y que se compare con un zapato importado. “Nuestros clientes son las cadenas comerciales. De la mano de ellos estamos logrando los estándares de calidad e innovación permanente”.

Jiménez dice que acorde a lo que requiere el cliente de los almacenes, ellos se ajustan en la moda, tendencias y colores. Para cumplir estos estándares decidieron importar la materia prima como las suelas de caucho. “Nos caracterizamos por armar un zapato con los mejores materiales que compita no en el mercado local, sino internacional. La proyección con es exportar con ayuda del Ministerio de la Producción”.

En enero de este año, los emprendedores efectuaron una nueva inyección de recursos. Con USD 50 000 compraron las armadoras de puntas, conformadora de talones y prensas de última tecnología. Uno de los puntos clave del emprendimiento es la re inversión de utilidades. Además participan en las ferias de Brasil, Colombia, Italia, España y México para adelantarse a las nuevas tendencias, diseños y colores.

La primera colección de calzado urbano que presentó en enero del 2012, estuvo de moda los colores primarios rojo, azul y amarillo con sintéticos y cueros… Logró una buena demanda de su producto que duró hasta diciembre. La última colección presentada en julio se basó en la línea ‘Vístele al blanco’. “Nuestras colecciones las sacamos están dirigidas para el hombre y la mujer que ahora buscan estar a la moda. La nueva colección saldrá en septiembre”.

Desde hace tres años uno de sus clientes es María Dolores Cruz propietaria de una cadena de calzado que funciona en todo el país. Cuenta que la calidad del producto evolucionó. “Así ofrecemos un buen producto a los clientes de nuestro locales y está a la altura de un calzado importado”.

Según Cruz, es uno de los proveedores que constantemente presenta al mercado nuevas tendencias, colores y diseños que tienen gran aceptación en los jóvenes y adultos.