El director ejecutivo de una compañía está obligado a actualizarse siempre, fijar el norte de la firma, desarrollar habilidades blandas y más

El director ejecutivo de una compañía está obligado a actualizarse siempre, fijar el norte de la firma, desarrollar habilidades blandas y más. Foto: Ingimage

El CEO se digitaliza y asume un rol integral

7 de agosto de 2019 11:16

El CEO de hoy se mueve en medio de la aceleración tecnológica, la obligación de desarrollar habilidades blandas y la tarea de un trabajo estratégico con el directorio. A esto hay que sumar las obligaciones tradicionales, en las que la clave es entender sobre las finanzas, el marketing, las ventas y la operación de la compañía.

El término CEO o ‘Chief Executive Officer’ se usa por lo general para designar al director ejecutivo de una compañía. El término es utilizado por multinacionales, empresas familiares y ‘start ups’, pero también por emprendimientos pequeños, aunque en estos casos lo más adecuado es gerente o fundador, según los expertos.

Daniel Arévalo es el número uno de Glovo en Ecuador. Su cargo exacto es General Manager, “que equivale al CEO de la firma en el país”. Para este ejecutivo, el CEO de una compañía es en la actualidad 100% generalista. “Debe entender muy bien las operaciones, el marketing, las ventas y las finanzas. Tiene el rol de estratega de la empresa con visión hacia los próximos dos o tres años de la empresa que dirige”.

Para Arévalo, la clave para desempeñar este cargo hoy en día está en el cumplimiento de planes, así como en pensar en largo plazo, pero con una ejecución en el corto tiempo.  Además, la persona que ocupa este puesto requiere habilidades blandas para tratar al equipo y motivarlo.

En el caso de Glovo Ecuador, Arévalo tiene un equipo de 30 personas en el país, distribuidas en ventas, marketing, manejo de cuentas, etc. “Yo le rindo cuentas a España”, en donde está la base de esta compañía que opera hace un año en Ecuador.

Otro caso es el de Antonio Mortales, CEO de Location World, una firma ecuatoriana especializada en desarrollar tecnología telemática y nuevos modelos de negocio a través del Internet de las Cosas. Esta compañía tiene nueve años, cerca de 170 empleados y suma operaciones en Ecuador Colombia, Perú y Argentina.

Para Morales, los CEO de hoy tienen un rol más integral, con liderazgo transformador y con mucho enfoque en lo digital. “El CEO tradicional aislado de la parte tecnológica ya no está vigente. Todas las industrias están empezando procesos de transformación digital. Entonces se necesita nuevas habilidades como el manejo de ‘big data’, con capacidad de liderar equipos, y de entender que la tecnología es transversal”.

El CEO de Location World cree que otra condición fundamental es el autoaprendizaje, dado los cambios tan rápidos que se viven en la actualidad. “Lo que aprendimos en la formación tradicional ya no es relevante. El CEO debe esforzarse en aprender más”.

Paola Durán, especialista en LinkedIn y en la búsqueda de talentos para empresas, añade que el líder de una empresa debe tener suficiente capacidad para adaptarse a los cambios, para relacionarse y perder temores ante lo que no se sabe. También destaca la necesidad de generar confianza con su equipo y “no perder la conexión humana”.

Un punto crucial en el trabajo de un CEO es la relación con el directorio de la compañía, que por lo general está integrado por accionistas, inversionistas o directores externos. Roberto Estrada, socio de Deloitte y director del área de comportamiento humano en el IDE Business School, explica que el director ejecutivo de toda firma le reporta al directorio.

La manera en la que el CEO asuma su función marcará el futuro de la compañía, añade Estrada. “La mentalidad es fundamental. Si cree que tiene la última palabra y que nadie lo puede cuestionar va a tener inconvenientes”.

Para Estrada, la relación CEO-directorio es como la de un profesor y sus alumnos. “Los estudiantes necesitan ideas para participar, cuestionar y objetar al profesor. Si eso se cumple de manera respetuosa la clase avanzará y ganarán todos. Lo mismo ocurre con un CEO y su equipo de trabajo”.

Este experto asegura que el CEO y el directorio son socios estratégicos y aliados por el bien de la organización. Juntos, añade, pueden detectar errores. Para esto es fundamental que al conformar un directorio hay que sumar gente prominente, exitosa, que vaya a aportar y no solo a dar vistos buenos.

El CEO de Location World concuerda y añade que los directorios esperan de un CEO un líder que se reinvente y que reinvente el negocio. Ante esto el director ejecutivo debe ser claro y transparente y advertir sobre los riesgos que tiene el proceso de trasformación de la empresa. “Allí hay sacrificios y decisiones que tomar”.