Se tituló como ‘coach’ profesional luego de un año de estudios.  Tiene un MBA

Andrea Mulky se tituló como ‘coach’ profesional luego de un año de estudios. Tiene un MBA. Foto: Diego Pallero / LÍDERES

Andrea Mulky: ‘Lo que importa es generar valor en el entorno’

6 de agosto de 2019 11:23

Una mujer multifacética. Así se puede catalogar a Andrea Mulky quien es ingeniera comercial, ‘coach’, especialista en recursos humanos y triatleta.

Estudió su pregrado en la Universidad Católica y cuenta con un MBA del IDE Business School. Ella comenta que aprender siempre ha sido una de sus pasiones.

Comenzó a trabajar cuando tenía 20 años y desde entonces no ha parado. Ha colaborado para empresas de diferentes sectores económicos y, actualmente, se encuentra en una firma dedicada al segmento de cosmética y belleza.

“Se me han abierto las oportunidades profesionales para especializarme en el campo del talento humano en Ecuador. He tenido la oportunidad de liderar, en algunos de mis cargos, el tema de mujeres”, comenta.

Profesión

“Yo me llevé a mi misma en mi vida profesional. Mi papá siempre me dijo ‘nunca dejes que los demás decidan por ti’. Creo que es una de las cosas que más me marcó en la vida porque me hice un camino y decidí estudiar, formarme y encontrar las maneras para seguir siempre avanzando.

Siempre trato de dar lo mejor de mi misma, una milla extra.

Dentro de los roles que he desempeñado ha estado el liderazgo de temas relacionados con la capacitación de mujeres, inspirándolas a despertar su potencial.

El trabajar con mujeres me ha empujado a seguir creciendo profesionalmente. Donde laboro, actualmente, se impulsa belleza para lograr realización personal.

A través del talento, el modelo de negocio y los programas de responsabilidad buscamos el empoderamiento de las mujeres en la región. Es uno de los puntos más valiosos que tiene mi lugar de trabajo y un propósito con el que me identifico plenamente.

He dirigido diferentes programas para el apoyo de mujeres, incluido uno de emprendimiento. También he sido emprendedora”.

Ser mujer

“Para mí, el hecho de ser mujer ha sido un privilegio. Siempre he estado en entornos femeninos, desde el colegio. La vida me ha ido conectando en este ámbito.

Dentro de los ambientes en los cuales me he desarrollado ha pesado mucho el valor profesional. En el mundo, no importa el hecho de ser mujer o no serlo, sino la decisión de generar valor en el entorno en el que uno está.

Siempre me he preparado mucho y eso me ha permitido poder insertarme más fácilmente dentro de los entornos laborales.

Como mujer se debe creer en una y en todas las capacidades que se tiene. Se debe poseer liderazgo personal, metas y una visión.

Además, hay que tener competencias, las capacidades necesarias para enfrentar los retos empresariales, emprendedores o del futuro que se tenga planeado.

Las mujeres debemos poseer competencias como la perseverancia, el avance aunque sea en pequeños pasos, el conocimiento sobre negocios, entre otros”.

Emprender

“Emprender en Ecuador es un reto que no es difícil. Lo más fuerte es mantenerse en el negocio.

Los emprendimientos, particularmente de mujeres, necesitan redes de apoyo para seguir.
Es valioso que las mujeres nos demos soporte y nos ayudemos para crecer, alcanzar metas y lograr objetivos. Es algo que nuestro entorno está haciendo”.

Trabajo y familia

“Los retos de la mujer profesional de hoy son diferentes. Nos hemos capacitado para asumir nuestros nuevos roles.

El reto de hoy es el equilibrio. No el de la familia y el trabajo, sino el de uno mismo. Me refiero a cómo lograr canalizar la propia energía; porque en ciertos momentos las mujeres acumulamos mucho estrés.

Es importante ocuparnos de nosotras mismas. Debemos gozar de nuestras pasiones, de nuestros gustos, etc.

A veces no sé ni cómo lo hago. Me gusta el deporte. Mi día se inicia a las 05:00 y voy a entrenarme; luego estoy con mi hija, voy al trabajo, regreso, estoy con mi familia, etc. Tengo un equilibrio en todas mis dimensiones”.

Competir

“Alguna vez tuve que competir con hombres, no hablo de la parte laboral. Lo hice y me tocó ganarme mi lugar ¿Cómo lo hice? Participando, arriesgándome, influyendo, comunicándome, generando presencia, entre otros.

Ser mujer es un regalo divino. No somos ni más ni menos, sino seres con mucha potencialidad.

Siempre me estoy poniendo metas. No es para exponerme, sino porque me hacen sentir viva. Lo hago todos los años”.