Uno de los emprendedores que se beneficiaron del el proyecto Mi encubadora mipymes.

Uno de los emprendedores que se beneficiaron del el proyecto Mi encubadora mipymes. Foto: Cortesía

Estudiantes capacitan y asesoran a emprendedores

4 de febrero de 2019 14:09

Desde hace dos años, 80 estudiantes de tres universidades con sede en Santo Domingo de los Tsáchilas brindan asesoramiento a emprendedores.

Ellos son parte del proyecto Incubadora de Mipymes, que ejecuta el Municipio de Santo Domingo. Con este proyecto se busca capacitar a cerca de 100 emprendedores de la provincia e impulsar sus negocios.

Los estudiantes ayudan a través de capacitaciones sobre tributación, registro sanitario, mercadeo. También realizan un plan de negocios para los emprendedores. A través de la elaboración de este plan, los emprendedores analizan las fortalezas y debilidades que tiene su microempresa.

Según el Municipio, el proyecto se inició en el 2017 con los estudiantes de las carrera de Administración de Empresas y Contabilidad de la Universidad Autónoma de los Andes (Uniandes).

En la primera fase se entregaron 80 planes de negocios para los microempresarios de la provincia, vinculados a la repostería, calzado, artesanías, lácteos, cárnicos, eventos sociales y otros.

Freddy Cañizares, director de la Uniandes, asegura que el trabajo que se realiza en la incubadora es capacitar a los micro, pequeños y medianos empresarios.

La capacitación permite que los emprendedores asistan a ferias  con mejor preparación.

La capacitación permite que los emprendedores asistan a ferias con mejor preparación. Foto: Cortesía

Los temas que han aprendido los emprendedores están relacionados con la atención al cliente, regulación de productos, buenas prácticas de manufactura, plan estratégico, análisis FODA, nuevas técnicas de mercadeo, administración para no contadores, gestión financiera, plan de negocios...

“En menos de seis meses el emprendedor aprende lo que a nuestros estudiantes les lleva hasta seis semestres de estudios”.

Santiago Navarrete, propietario del negocio Los Brownies de Ela, señala que el proceso de la Incubadora de Mipymes le sirvió para potenciar su negocio y sacar el registro sanitario. También trabajó en el plan de negocios con dos estudiantes de la Uniandes, con quienes trabajó en un plan de distribución del producto.

Desde el 2018, a este proyecto se unieron la Pontificia Universidad Católica del Ecuador sede Santo Domingo y la Universidad Tecnológica Equinoccial (UTE). Además, también se vincularon el Instituto Superior Tecnológico Tsáchila y el Instituto Calazacón.

Alexandra Coronel, del Departamento de Desarrollo Económico del Municipio, señala que hasta diciembre del 2018 se capacitaron a 250 personas del cantón.

Esos talleres son parte de la primera fase del proyecto, en el que el emprendedor debe mejorar la fórmula del producto o el logotipo y marca, hacer los trámites para el registro sanitario, aprender sobre tributación y leyes.

“Para eso se contó con aliados estratégicos como el Servicio de Rentas Internas, el IESS, ProEcuador, Arcsa, Secap, el Ministerio de Industrias, el IEPS, Banecuador y el Ministerio de Agricultura.

En la segunda fase, en cambio, deberán participar en ferias para aprender a vender su producto.

Eso los deja listos para la última fase, que es la rueda de negocios, en la que participan marcas de supermercados y empresarios a escala nacional.

Coronel afirma que en el 2018 se realizó la cuarta rueda de negocios. Para esa actividad, se empezaron a capacitar con tres meses de anticipación y al menos 40 emprendedores concretaron negocios con supermercados locales como Supersav, La Feria y nacionales como Tía.

Otros 40 recibieron recomendaciones y se acordaron nuevas citas con los empresarios.
Coronel señala que el éxito de las últimas dos ruedas de negocios se deben a que los emprendedores se empezaron a preparar con permisos, marcas mejor elaboradas, registros sanitarios y además se hicieron simulaciones de la rueda de negocio.

Para María Vera, estudiante de la carrera de Contabilidad y Auditoría de la PUCE Santo Domingo, las capacitaciones que realizó fueron un aporte en su formación profesional.

“En la actividad no solo colaboramos nosotros con el microem­prendedor, también tuvimos la oportunidad de recibir la asesoría de una persona capacitada en grandes emprendimientos. Esto me ha permitido analizar el campo empresarial en el que me gustaría emprender”.