Los fabricantes de vehículos industriales presentes en China, en especial de camiones pesados, se enfrentarán a un período de ajuste del sector durante los próximos tres o cuatro años. Foto: Archivo / EL COMERCIO

Los fabricantes de vehículos industriales presentes en China, en especial de camiones pesados, se enfrentarán a un período de ajuste del sector durante los próximos tres o cuatro años. Foto: Archivo / EL COMERCIO

Los fabricantes de camiones esperan un período de ajuste en China hasta 2018

9 de febrero de 2015 16:48

Los fabricantes de vehículos industriales presentes en China, en especial de camiones pesados, se enfrentarán a un período de ajuste del sector durante los próximos tres o cuatro años, según concluyeron varios expertos de este subsector automotriz, recoge este lunes 9 de febrero el diario oficial Global Times.

Además de ser el mercado más grande del mundo de automóviles, China es también el mayor mercado de camiones pesados del planeta (acaparó cerca del 42 por ciento de las ventas mundiales en 2014), e igual que empezó a ocurrir con los coches, se espera que ahora tienda también hacia una mejor calidad en seguridad y emisiones.

El principal motor para este cambio será la ralentización del crecimiento económico de China, una "nueva normalidad" a la que el sector tendrá que adaptarse para ser capaz de seguir creciendo a la vez que mejora en ambos aspectos, explicó un experto en un seminario celebrado en Sanya (sur).

"El rápido desarrollo del mercado chino de vehículos comerciales en la última década no era sostenible, y vino a costa de un grado elevado de emisiones contaminantes, daños en las carreteras y frecuentes accidentes de tráfico", afirmó Feng Feng, delegado de la Asociación de Fabricantes de Automóviles Europeos en China.

Por ello, será necesario que las marcas presentes en el país se adapten a las nuevas circunstancias y den con el equilibrio entre una menor demanda y la necesidad de ofrecer mejores camiones, indicó.

En efecto, según la Asociación de Fabricantes de Automóviles de China (CAAM), las ventas de vehículos comerciales cayeron en el gigante asiático un 6,54 por ciento interanual, hasta los 3,79 millones de unidades, mientras que en 2013 habían llegado a crecer aún un 6,4 por ciento.

En comparación, las ventas de automóviles en total crecieron un 6,9 por ciento en 2014, hasta alcanzar un récord de 23,49 millones de unidades.

Con todo, los grandes fabricantes mundiales siguen fortaleciendo su presencia en China, que "sigue siendo un enorme mercado para los camiones pesados a pesar de la ralentización", explicó Claes Svedberg, vicepresidente para China del grupo sueco Volvo, que en enero creó su nueva firma mixta en el país con la estatal Dongfeng.

"Desde el punto de vista de la tecnología, no es demasiado tarde" para entrar en el mercado, ya que "China necesita mejorar su eficacia en el transporte y reducir sus emisiones", indicó.

Tras 10 años de negociaciones, Volvo adquirió el 45 por ciento de la filial de camiones de la compañía china, Vehículos Comerciales Dongfeng (DFCV), que aunque produce vehículos de la marca Dongfeng, fortalecerá la posición de Volvo en el mercado oriental.

Volvo tenía ya otra empresa mixta menor en el país, la Dongfeng-Nissan-Diesel.

Otras marcas europeas entraron también recientemente en China, como Man (que compró un 25 por ciento del Grupo Nacional de Camiones Pesados de China en 2009) y Daimler (que en 2012 creó una empresa mixta con Beiqi Foton).