Este sistema alemán avanza en el Ecuador de la mano de empresas, gremios productivos, universidades e institutos tecnológicos. La satisfacción es grande. Foto: cortesía

Este sistema alemán avanza en el Ecuador de la mano de empresas, gremios productivos, universidades e institutos tecnológicos. La satisfacción es grande. Foto: cortesía

La formación dual abre puertas

3 de julio de 2020 11:35

La formación dual se consolida en Ecuador y trae una serie de oportunidades, más aún en situaciones adversas como las que atraviesa el país hoy en día. Este modelo, de origen alemán, permite estudiar una carrera técnica al mismo tiempo que se trabaja en una empresa.

El objetivo es mejorar la productividad y la competitividad del país. En Ecuador, el modelo se aplica de hace algo más de 25 años, pero es en la última década que ha tomado relevancia, con el apoyo de universidades, gremios productivos y empresas.

Hasta mediados del año pasado en Ecuador se contaban 11 carreras dentro de la formación dual. Además, 129 empresas eran parte del modelo y 529 estudiantes habían sido parte del programa. Otro dato dice que 423 tutores empresariales habían sido formados, según la Corporación Formados.

Juan Fernando Gutiérrez, presidente Ejecutivo de la Corporación Formados, asegura que este sistema es una gran oportunidad para el país. “Ecuador ha tenido un problema en productividad. Y la formación dual ayuda a que las empresas y los trabajadores produzcan más y mejor”.

Para Gutiérrez, en la actual coyuntura en la que se habla de reactivación, la formación dual viene a ser una aliada de la academia y del sector productivo.

En estos días, autoridades y gremios señalan que alrededor de 900 000 personas quedarán sin empleo en Ecuador, tras la pandemia del covid-19 y sus efectos en la economía nacional. “Para salir adelante habrá que formar a los jóvenes para que sean parte de la plana principal de las empresas”, dice el vocero de Corporación Formados.

Bajo este sistema el estudiante obtiene una certificación alemana; además se utiliza la misma malla curricular y programa alemanes con la idea de que el título sea en Ecuador de tercer nivel.

Las empresas que son parte del programa se ubican en Quito, Guayaquil, Cuenca, Manta. En la capital azuaya existe mayor experiencia en el sistema. Allí uno de los protagonistas fue la Cámara de Industrias que apoyó la formación dual desde hace cerca de 18 años en carreras universitarias.

Graiman es una de las empresas que se apoya en la formación dual desde el 2015. Su gerente General, Juan Pablo Malo, destaca que el sistema es la mejor forma de tener una estructura sostenible que permita que la gente se capacite. “En este modelo se desarrolla un círculo virtuoso entre la academia y la empresa. Los trabajadores se educan y producen al mimo tiempo trayendo beneficios para las empresas y para el país”.

Para Malo, el trabajador tiene una motivación especial al adquirir conocimientos que le serán útiles en su trabajo y le asegura un empleo de calidad. “Eso deja ver que existe un componente social importante detrás”.

Otra de las empresas que confían en el sistema alemán es Colineal. Marcos Montero, jefe de producción de la firma de muebles, detalla que se unieron al programa hace dos años.
Colineal trabaja con el Instituto Tecnológico del Azuay y los estudiantes de la carrera de Tecnología de la madera. “Es un centro de carreras técnicas con alto potencial y demanda”.

Para Montero, el mayor beneficios es el retorno del tiempo invertido en los estudiantes. “Los tutores son fundamentales y los conocimientos que comparten son muy valiosos. Además, los jóvenes llegan a trabajar a la empresa con buenos conocimientos teóricos y prácticos”.

En el área de investigación y desarrollo, añade Montero, se busca ingenieros mecánicos que tengan bases sólidas en materias como diseño, software, maquinaria “y el programa de formación dual cumple esas condiciones”.

90% de satisfacción
Para dar seguimiento al programa, Corporación Formados realiza encuestas con las empresas formadoras y los estudiantes que son parte de esta modalidad

“Este nos permite conocer dónde se ubican los chicos graduados del programa y si están en trabajos acordes con sus carreras universitarias”, dice Juan Fernando Gutiérrez. Uno de los resultados de las encuestas señala que el 85% de graduados siguen vinculados a la misma carrera de su formación. “Eso es algo fundamental”.

Gutiérrez agrega que la empleabilidad es otra clave, y por eso la formación dual apunta a que los jóvenes tengan una opción laboral tras graduarse. El año pasado la satisfacción de las empresas y los estudiantes fue mayor al 90% según las encuestas.

En el largo plazo se busca además que los jóvenes estén en la capacidad de emprender negocios propios gracias a sus habilidades y conocimientos, dice el jefe de Producción de Colineal. “Es importante que tengan un trabajo, pero más valioso aún es que tengan la capacidad de generar empleos, más aún en tiempos de crisis como los que se viven”.

129 empresas eran parte del programa de formación dual en Ecuador hasta el año pasado