Burger King y Mac Donald’s son dos ejemplos de innovación en el modelo de negocio con un enfoque de largo plazo. Fotos: archivo / LÍDERES

Burger King y Mac Donald’s son dos ejemplos de innovación en el modelo de negocio con un enfoque de largo plazo. Fotos: archivo / LÍDERES

Innovación empresarial y otros idilios

7 de noviembre de 2019 16:42

Con 52 años, diabético, ordinario, artrítico y luchando por vender una máquina para hacer batidos de leche a lo largo de Estados Unidos. Así empieza la leyenda de Ray Kroc, conocido actualmente como el fundador de McDonald’s; la mítica transnacional de comida rápida que tiene operaciones globales.

Lo que se conoce es lo que se ve, mas no es la esencia. Kroc no fundó Mc Donald’s; la transformó en una organización de excelencia operacional.

“El fundador” no fue quien generó la idea, ni siquiera fue quien la implementó en sus inicios.

Kroc tomó un modelo de negocios de éxito local (de los hermanos McDonald) y lo transmutó en una máquina de mejora continua con orientación dogmática a la eficiencia de procesos como medio de generación de valor a sus clientes: atenderlos de la mejor manera en el menor tiempo posible. Una máquina inyectada por el combustible de alta eficiencia y eficacia de sus procesos de gestión inmobiliaria.

Como el mismo Kroc lo dijo en 1970: “No estamos en el negocio de las hamburguesas, estamos en el de los bienes raíces”.

Este visionario generó valor sin física cuántica: innovó la estructura del negocio. Y lo hizo en sus cincuentas por cierto (vale la mención en un mundo que caduca todo lo mayor a cuarenta.)

Con el antecedente de Kroc, demos paso a un análisis más reciente. Durante el primer semestre de este año, Burger King dio a conocer su proyecto Traffic Jam Whoper. Una iniciativa enfocada en ciudades de alta congestión vehicular. La idea central es utilizar tecnología de tiempo real para entregar los pedidos directamente en los autos de los clientes.

¿Fascinante? sin duda; pero ¿cuál es la raíz del proyecto si no la de modificar el proceso de entrega del pedido mediante la aplicación de tecnología?

Excelencia operacional e innovación. En ambos casos la segunda respondió a las necesidades de la primera y no al contrario.

La lista podría seguir con firmas globales como Uber, Glovo y otras empresas, gestionando los viejos y conocidos servicios de mensajería y transporte con excelencia operacional mediante la tecnología. Lo milenario ahora de forma más eficaz y eficiente.

Para innovar es prioritario entender a profundidad la dinámica de pérdida o de generación valor. En otras palabras, es vital entender la operación. Ese es ante todo un proceso de observación, análisis y síntesis. Pensamiento empresarial puro; algo que no es automatizable aún.

Para que quede claro: amarrarse los cordones no puede preceder a colocarse el calzado.
Mi invitación a los ejecutivos es a que no se desborden por lo fantástico y se inclinen por lo útil.

Asegúrense de comprender adecuadamente las dinámicas de generación y pérdida de valor. Una vez allí investiguen los posibles enfoques de innovación incremental, disruptiva o lo que el siguiente gurú determine.

La estrategia y la operación son los pilares, enfóquense en ellas.

La generación de valor es el fin, la tecnología un medio. Innovar es en esencia resolver los problemas del mundo de forma cotidiana.