En Uqu buscan especializarse en elaborar una línea de productos  integrales. Foto de la página www.uqukombucha.com

En Uqu buscan especializarse en elaborar una línea de productos integrales. Foto de la página www.uqukombucha.com

Esta ‘kombucha’ tiene una identidad andina

28 de septiembre de 2020 13:16

Los imbabureños José Caiza, Cristian Puente y Joaquín Purtschert se asociaron para elaborar la kombucha andina UQU.

Esta bebida, de té negro fermentado con levaduras, se vende en cadenas de supermercados y a través de la Internet, desde hace dos años.

Purtschert recuerda que conoció sobre esta receta, de origen asiático, por su abuela materna,
Nelly Dávila. Ella la preparaba y la llamaba agua de hongo.

“Lo interesante de la kombucha es que contiene microorganismos vivos que cumplen con la función probiótica y ayudan a mantener fuerte el sistema digestivo”, dice.

Los primeros ensayos para el procesamiento de este néctar lo realizaron en la cocina de la casa. El objetivo fue obtener una bebida de origen natural, que no requiera de aditamentos artificiales para su conservación.

Previamente hicieron un estudio de mercado para determinar la oferta y las oportunidades en el mercado ecuatoriano.

Los emprendedores aprovecharon la capacidad instalada de la Cervecería Caran, de propiedad de la familia de Purtschert, para producir y sacar al mercado ecuatoriano este producto.

Hasta el momento han invertido unos USD 30 000 en la adquisición de materia prima, permisos sanitarios y creación y diseño de la marca.

UQU está inspirada en la mitología del Uku Pacha, que en la cosmovisión andina se define como el mundo de abajo. Caiza explica que también hay elementos como el sol y la cruz andina. “Queríamos diseñar un producto no solo diferente, sino que llame la atención del público”.

Por eso, las botellas, de 350 ml fueron traídas desde China. La otra presentación que se ofrece es en un envase de 2,5 galones.

Toda la etapa de fermentación dura dos semanas en completarse. Joaquín Purtschert, ingeniero en alimentos de profesión, explica que las levaduras permiten transformar la teína y el azúcar en esta bebida milenaria.

En esta etapa es importante controlar la temperatura, para que se desarrolle bien el cultivo.
Uno de los elementos que destaca como clave es el agua, que es extraída a 60 m de profundidad en las faldas del volcán Imbabura.

Otro de los ingredientes para la preparación que destacan son las plantas y frutas. UQU ofrece tres sabores: el original de té negro fermentado; moras, fresas y flor de Jamaica; taxo y maracuyá.

También hay productos de temporada como las kombuchas de sandía, kiwi y hobo, este último florece en el valle del Chota.

El chef Cristian Puente resalta que todo el proceso es artesanal. “El té fermentado de forma natural permite producir probióticos y ácidos orgánicos saludables”.

Agrega que este producto. al ser destilado al frío, permite conservar sus sabores naturales.
Durante la pandemia se incentivó la promoción y venta a través de las redes sociales de UQU. Los pedidos se pueden despachar vía correo a cualquier ciudad del país.

La otra opción es abrirse mercado a través de tiendas y cafeterías especializadas. Ese es el caso de Jatunwasi Granel Gourmet, de Riobamba, que entre las novedades para sus clientes incluyó la kombucha UQU, a partir del 7 de septiembre pasado.

Los mentalizadores de la empresa imbabureña buscan establecer nuevos puntos de venta en restaurantes y cafeterías. Igualmente, quieren entablar alianzas con promotores comerciales del Ecuador.

La meta de los emprendedores es generar una línea de productos que contribuya a transformar los hábitos alimenticios. Por eso, tienen en desarrollo la miel de ágave, que se obtiene del penco azul.

Por lo pronto, realizan contactos con productores locales para garantizar el abastecimiento de la materia prima.

30 000 dólares es la inversión inicial que ha realizado para este emprendimiento.