Yadira Guanulema y Luis Carrera son los creadores de este emprendimiento. Sus productos se venden en tiendas de Quito y Cumbayá. Foto: Patricio Terán / LÍDERES

Yadira Guanulema y Luis Carrera son los creadores de este emprendimiento. Sus productos se venden en tiendas de Quito y Cumbayá. Foto: Patricio Terán / LÍDERES

Un accesorio para cargar al bebé de forma tradicional

25 de abril de 2018 08:46

Con el producto de Nantu, un bebé es envuelto en tejidos artesanales para ser cargado por sus progenitores como se lo hacía cientos de años atrás. Este emprendimiento recrea la forma tradicional en que se lleva al bebé con una adaptación ergonómica.

Yadira Guanulema es la fundadora. Ella comenta que el negocio empezó en agosto de 2016 como una necesidad que ella sentía para cargar a su hija. El producto consiste en un fular, un pedazo de tela con medidas especiales para envolver a un bebé. El tejido es elaborado artesanalmente con diseños andinos por artesanos de Peguche, en Otavalo.

Guanulema presentó estos diseños en ferias a finales de 2016. Entre otras menciona la Feria de la Liga de la leche en La Floresta; la Feria de Mujeres Autónomas en la Universidad Andina y la feria Textura, Colores y Sabores.

La marca presentó dos variedades de portabebés: uno elástico y otro rígido. Guanulema comenta que su portabebé llamó la atención de bastantes parejas que esperaban un hijo. La emprendedora explica que el acto de cargar al niño por medio de un manto está presente en todas las culturas del mundo y permite que la madre realice sus actividades mientras lleva a su bebé cerca. En Ecuador está práctica es más evidente en las zonas rurales indígenas de la sierra y oriente.

Para el desarrollo conceptual del producto Guanulema utilizó la teoría de la ‘exterogestación’. Este concepto propone que el bebé al nacer necesita sentir el calor y confort que sentía dentro del vientre mientras se adapta al nuevo mundo que lo rodea.

La dueña de la marca asegura que el fular en el que se envuelve al bebé recrea la posición en la que el niño se encontraba en el útero.La actual tejedora, Matilde Lema, realiza los fulares en Peguche con la técnica artesanal en un tradicional telar de madera.

En 2017 estos productos entraron en Tikitá, una tienda de artículos infantiles para crianza alternativa. En el mismo año, Nantu sacó al mercado la variedad Mei tai, un portabebé de modelo asiático.

El producto, que incluye una capucha, tiene mecanismo ajustable con cinturón y tiras para adaptar el panel al tamaño del bebé. Además, sacó a la venta juguetes ecológicos como mordedoras con aro de madera recubierta con laca natural, collar de lactancia y peluches con lana de alpaca.

Guanulema comenta que se realiza una asesoramiento con preguntas como la edad y peso del bebé, con esta información recomienda el fular adecuado. Lina Santa Cruz conoció del producto en una feria en Cuenca y destaca la comodidad para realizar diversas actividades mientras carga a su hijo.

Este año los productos de Nantu entraron a Pompon, una tienda de artículos para bebé en Cumbayá. El emprendimiento ofrece tutoriales sobre el uso correcto del fular en Facebook y en su canal de youtube Nantu Respetuoso. La marca tiene un catálogo digital en formato de revista. Actualmente el emprendimiento desarrolla el prototipo de una mochila para cargar al bebé con diseño ergonómico.