En plena mañana nublada y gris, la energía solar llega a las instalaciones de la empresa Provefrut.
En ese momento, a las 09:00 del 8 de febrero de 2022, se generan 312 kilovatios. Javier Pérez, jefe de Mantenimiento de esa firma, verifica esa información en su celular.

Mientras se camina por los pasos cebras y cerca de las gavetas con brócoli recién cosechado se observa hacia el fondo una especie de tableros sobre una amplia planicie. Ahí, en una hectárea de terreno están instalados 2 156 paneles, que capturan la radiación solar, que se tiene en esta zona de la parroquia Guaytacama (Latacunga), entre las 06:00 y las 18:00.

Esa planta fotovoltaica tiene una capacidad de generación de hasta 900 kilovatios de energía, que se usan en los procesos productivos de Provefrut, explica Pérez.

Fernanda Pólit, gerente general de la empresa, dice que en la zona de la Sierra centro es la primera agroindustria con esta tecnología.

Esta firma se dedica al procesamiento de alimentos congelados para la exportación, especialmente de brócoli, pero también coliflor, romanesco, zanahoria, kale y espinacas. Una parte es orgánica y la otra es convencional.

Los paneles pueden generar entre 100 y 900 kilovatios durante el día, así el cielo esté nublado, porque el país tiene el privilegio de estar en el centro de la Tierra, opina Pérez. Guaytacama es una zona rural de Cotopaxi, a 2 906 metros sobre el nivel del mar.

Desde que funcionan se ha llegado hasta la capacidad máxima, como en noviembre y diciembre, que fueron meses con mucho sol.

Su operación comenzó el 11 de septiembre de 2021 y desde entonces ha contribuido con un 10% del consumo total de energía de la empresa, indica.

Pero lo más importante para la empresa es que ha dejado de emitir 350 toneladas de dióxido de carbono (CO2), que es uno de los objetivos de su política ambiental y social, para contribuir con la buena salud del planeta.

Pérez comenta que se invirtió en esta planta, porque Provefrut “siempre ha trabajado en la gestión de energías limpias, para mejorar sus procesos y ser más productiva con el uso de una menor cantidad de energía”.

Antes de esta iniciativa, Provefrut consiguió la certificación Carbono Neutro, afirma Sarah Spitz, gerente de Desarrollo Humano. Pólit completa que compraron carbono para compensar las emisiones y así se certificaron.

Para la construcción de la planta solar se destinaron USD 700 000. Para ella, es una inversión que se recuperará en seis años por el ahorro en el pago de las planillas eléctricas y porque la infraestructura tiene una vida útil de 25 años.

Pólit resume lo que persigue la empresa: este sistema es parte de su política corporativa y fue un paso más dentro de su visión de trabajar con técnicas sostenibles y sustentables, para ahorrar en el uso de recursos naturales.

Pérez añade que en 2013 se hizo una revisión de gestión de energía y se decidió cambiar todas las líneas de producción. El cambio comenzó en 2016 y les tomó tres años. Adquirieron máquinas y tecnología, que fueran amigables energéticamente y eficientes.

Por ejemplo, en la línea IQF se reemplazaron los equipos (blanches o calderos) de cocción del producto; ahora se utiliza menos vapor para cocinar en el mismo tiempo de operación y con la misma calidad. La producción por hora se duplicó de 1 700 a 2 500 kilos.

Tienen cuatro líneas de producción renovadas que producen el doble y las horas productivas aumentaron, porque trabajan hasta 17 y 20 horas de corrido. Antes, se hacían paralizaciones de hasta 4 horas para la limpieza y deshielo.

Adicionalmente, tienen equipos que ayudan a reutilizar el agua que se emplea en el lavado del producto, en la cocción con vapor en el enfriado con agua. Todo ese recurso se recircula.

Con esa renovación tienen algunos productos especiales de colores, que son naturales; es decir, son variedades que tienen esa característica. Hay coliflores moradas, amarillas, verdes y blancas; y zanahorias: morada, naranja, blanca y amarilla, de exportación.

Hasta hace dos años se exportaba todo lo que se producía a sus tres principales mercados: Estados Unidos, Europa y Japón, y una pequeña cantidad a Canadá, América Latina y Rusia.

Pero, desde entonces, empezaron a vender al mercado nacional con su propia marca: Sierra Organic. Ofertan brócoli, arroz de coliflor y kale orgánicos y congelados en Supermaxi y Megamaxi.

Algunas cifras

858 personas trabajan en la empresa Provefrut. Son 390 mujeres y 468 hombres.

62 000 toneladas es la proyección de la producción de congelados para este año. En 2021 fueron 59 000 toneladas.

6 cámaras de almacenamiento de congelados funcionan. La última opera desde noviembre del año pasado, con 1 200 toneladas de capacidad.

2 300 toneladas es la capacidad de almacenamiento de las seis cámaras.