En la Universidad Nacional de Chimborazo investigan cómo se da el contagio de covid-19 en Riobamba. Imagen de www.freepik.es

En la Universidad Nacional de Chimborazo investigan cómo se da el contagio de covid-19 en Riobamba. Imagen de www.freepik.es

Un grupo multidisciplinario descubrió patrones en el contagio de covid-19 en Riobamba

2 de diciembre de 2020 16:27

La información que recaban los docentes de la Universidad Nacional de Chimborazo sustenta las medidas que se toman en el Comité de Operaciones en Emergencias de Riobamba (COE), para mitigar el contagio de covid-19.

Un grupo de investigadores, integrado por especialistas en estadística, matemática aplicada, informática y epidemiología se integró en esa academia para analizar cómo es el contagio en la provincia y buscar opciones para hacerle frente a la pandemia.

La investigación se inició en abril pasado, unas semanas después de que en Ecuador se decretara la emergencia sanitaria por el incremento de casos de coronavirus. Los docentes estructuraron una encuesta para aplicarla a la comunidad universitaria y obtener toda la información posible.

La encuesta tiene 22 preguntas y fue validada por tres organizaciones. El objetivo es georeferenciar los casos de covid-19, identificar patrones y proyectar las cifras del contagio a futuro.

Con la encuesta descubrieron, por ejemplo, que las primeras víctimas del virus en las familias que se contagiaron fueron los abuelos y los padres. También encontraron que los primeros afectados fueron las personas de estrato socioeconómico bajo.

“Probablemente se debe a que las personas con ingresos bajos son quienes no tenían posibilidades de adquirir mascarillas apropiadas y continuaron trabajando en la emergencia”, dice Víctor García, un docente especialista en matemática aplicada y líder del grupo de investigación.

Él cuenta que estructurar la encuesta y diseñar un sistema para procesar la información le tomó a los docentes de las facultades de Salud e Ingeniería cerca de seis semanas. Ellos trabajaron en turnos, y desde sus hogares, para diseñar la plataforma que en un inicio recibía datos únicamente de la comunidad universitaria.

“Alimentábamos nuestra base de datos con las respuestas de los estudiantes, administrativos y docentes, teníamos información de unas 30 000 personas. Pero luego el interés creció y ahora estamos preparando un plan piloto para aplicarlas también a los alumnos de dos colegios”, explica Anita Ríos, vicerrectora administrativa.

La información se procesa en los laboratorios de ingeniería. Los resultados obtenidos se remiten al COE local, donde cada martes una comisión médica que asesora a las autoridades examina los hallazgos de los docentes.

“Es muy importante que esta información sea estudiada por las autoridades, porque así pueden saber dónde están ubicados los focos de la infección y toman decisiones para prevenir más contagios”, explica García.

Un grupo de epidemiólogos también es parte del equipo de investigación. Ellos analizan virus vivos similares al coronavirus en sus laboratorios para entender cómo se comportan y se transmiten.

Entre tanto, en la Facultad de Ingeniería se está desarrollando un respirador mecánico para los pacientes que requieren cuidados intermedios. El proyecto se hace en conjunto con médicos de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de Riobamba.

“Queremos convertirnos en un referente de cómo la academia debe articularse con los gobiernos locales para encontrar soluciones que promuevan el desarrollo de los territorios”, dijo Nicolay Samaniego, rector de la Unach.

En las cuatro facultades de esa academia se educan unos 13 000 estudiantes. La oferta académica está compuesta por 31 carreras.

La Unach fue acreditada y es una de las 17 universidades ecuatorianas en el ranking QS.