La pandemia aceleró los procesos de digitalización en las empresas. En ese sentido, el trabajo de los departamentos de Recursos Humanos se reconfiguró y puso en evidencia la importancia de la capacidad de innovar y adaptarse a cambios bruscos.

Para los expertos, si bien el 2020 fue de desafíos, este año compromete retos mucho más grandes. Sobre todo, aquellos que se enfocan en la fidelización con la plantilla de trabajadores para evitar renuncias, ausentismo y desmotivación del personal para ejecutar tareas.

Según Alain Dehaze, director de Adecco Group, el año anterior se demostró la importancia de una buena gestión del talento humano. Las áreas vinculadas dejaron de ser de apoyo, y se consolidaron como áreas estratégicas para la supervivencia de los negocios.

Por ejemplo, los departamentos de recursos humanos sumaron esfuerzos con áreas administrativas para generar un ambiente de bienestar en medio de un escenario caótico por la emergencia sanitaria, pérdidas de familiares por contagios y el temor a salir de cada uno de los hogares.

“Durante el 2020, los directores de recursos humanos se convirtieron en las personas de confianza de los líderes de las empresas, esta tendencia continuará en este año, pues el personal de esa área fue el encargado de lidiar con los bloqueos y desaceleraciones económicas lo que incide directamente en el éxito de las organizaciones”, dice Dehaze.

En las empresas se otorgaron facilidades para trabajar en casa. Las firmas enviaron equipos tecnológicos para simular oficinas y en otros casos, en el que era necesario el trabajo presencial, se otorgaron los insumos de bioseguridad para que el empleado sienta plena seguridad de volver a laborar en campo.

Grecia Logroño, gerente de la consultora SosaCorp, explicó que las oficinas de talento humano se reconfiguraron y volvieron a maquetar un diseño de gestión que permita pensar a largo plazo.

En el sector privado, hasta el 24 de diciembre, la cifra de teletrabajadores creció 700% al compararla con el 16 de marzo cuando se inició la emergencia en el país.

Con la desaparición de un espacio físico fijo, en algunos casos, las empresas han visto la necesidad de digitalizar todos sus procesos y documentos, así como la forma de compartirlos.
En ese sentido, según Logroño, el desafío en este año es ofrecer a todos los empleados la opción de poder acceder y compartir los documentos de forma remota, de esta manera se vuelve más eficaz la gestión de equipos a distancia.

En 2021 habrá una tendencia creciente hacia la gestión de proyectos colaborativos basados en herramientas tecnológicas. Aunque ya se estaban utilizando, se mejorará su uso, con más frecuencia y con mayor conocimiento, aprendiendo las nuevas reglas de usabilidad, dice Logroño.

Además, según Adecco, el trabajo híbrido terminará de posicionarse en las empresas que comenzaron a implementar el modelo. La combinación del trabajo remoto y de oficina se ha perfilado como el ideal por su asociación a un concepto de flexibilidad.

El 2021 traerá acuerdos sobre lugares y horarios de trabajo flexibles, tanto para la empresa como para el empleado, puntualiza un estudio de la consultora.

Karla Burgos, líder de HR Leaders Consulting, señala que otra tendencia que marcará la gestión de las oficinas de recursos humanos es el liderazgo en remoto.

Burgos explica que las cabezas de las organizaciones deben ser más empáticas, capaces de gestionar y lidiar con la incertidumbre y mantener la motivación a distancia. “No hay la cercanía de las reuniones para conocer el estado de la plantilla, por esta razón, la evolución de los perfiles de liderazgo se debe centrar en crear un lazo fuerte que evite las renuncias o la falta de cumplimiento de metas”.

Burgos afirma que, dentro de un escenario de crisis aleatorias por el contexto de la pandemia, es necesario que los líderes de las empresas, en conjunto con los departamentos de recursos humanos se preparen aún más para contingencias o imprevistos. “El líder debe ser asertivo y aprender a manejar las crisis”.

Según Burgos, todo lo que quizás lo incomodaba y evitaba en el formato presencial, ahora lo tiene que asumir con mayor compromiso para retener al personal y generar un entorno laboral seguro.

Y, finalmente, un punto a considerar por parte de los expertos es la capacitación para transmitir de forma clara las nuevas normativas que puedan emerger en el transcurso del año. Estas puedan ser leyes, acuerdos ministeriales o decretos presidenciales que modifiquen la forma de laborar.

Adecco señala que, durante el 2021, se prevé un aumento en la importancia del área de RR.HH., pues las empresas necesitarán aún más navegar en entornos cambiantes y desarrollar nuevas formas de trabajar.

La cifra
158 341 empleados en el Ecuador laboran bajo la modalidad de teletrabajo, según el Gobierno.